Óleo Martos está inmersa en una dramática cuenta atrás. Si la semana que viene no tiene listo un plan de financiación, cerrará sus instalaciones y, consecuentemente, extinguirá 90 puestos de trabajo. Sería la muerte de la cuarta envasadora y comercializadora de aceite de oliva más fuerte de España.
El acuerdo con todos los proveedores está cerrado. Sin embargo, Óleo Martos tiene apenas siete días para lograr que 17 entidades financieras den el visto bueno a su plan de viabilidad y el compromiso de pago. Si no lo consigue, en diciembre, se verá abocada a acudir al Juzgado de lo Mercantil para solicitar un concurso de acreedores. Precisamente, su consejero delegado, Matías López Sánchez-Polaina, reconoce que sería el fin de la sociedad. “Óleo Martos es una empresa que necesita mucha liquidez para funcionar. Si entrara en concurso de acreedores sería para liquidarla”.
Y lo paradójico de este asunto es que Óleo Martos es una empresa rentable. De hecho, ha sorprendido a todo el sector oleícola porque, desde que se fundara en 1997, ha conseguido situarse entre las cuatro grandes comercializadoras de zumo de aceituna detrás de SOS, Sovena y Aceites del Sur. Está presente en 25 países y exporta el 30% de su producción. En cambio, ahora está en la “cuerda floja” por un problema con uno de sus socios fundadores. Matías López Sánchez-Polaina explica que ha interpuesto una querella criminal por estafa contra el que, hasta hace unos meses, fue socio y hombre de la máxima confianza. Además, figuran como acreedores privilegiados en el concurso contra sus sociedades, aunque aún no saben cuándo cobrarán —antes lo han de hacer sus trabajadores y la Agencia Tributaria—, ya que los pasos de los tribunales son firmes, pero, generalmente lentos.
De ahí que, ante este contratiempo, que la familia López Sánchez-Polaina considera que es una estafa y por ello han acudido a los tribunales, Óleo Martos necesita un plan de financiación. Desde el momento que se encontraron con el problema, comenzaron a trabajar. Tienen ya un acuerdo con los proveedores. No obstante, necesitan que las entidades financieras les den la viabilidad necesaria. Ahora, tienen comprometido el 70% de la financiación, pero les falta el 30% restante. Matías López Sánchez-Polaina dice que el Banco Sabadell, Banco Santander, Banesto, Bankinter y Barclays ya le han dado el sí por escrito. Saben que Óleo Martos responderá. Hay otras que se lo han comunicado por teléfono. Sin embargo, espera el compromiso de tres, que suponen el 30% que queda. No obstante, todas las entidades crediticias aclaran que entran en el plan siempre que se cubra el 100% del “pool financiero”, que en palabras menos técnicas quiere decir que, si acuden todas en las mismas condiciones, entrarán en el proyecto. En cambio, si alguna se cae, todas se retiran del plan. “Si no lo tenemos la semana que viene, cerraremos y despediremos a los 90 trabajadores de Óleo Martos y Bodegas López Mercier”. Además, dice que lo que más le duele es que son entidades de crédito muy vinculadas a la provincia.
De ahí que se espera que la próxima semana será angustiosa para la empresa. Si las entidades no les responden —tampoco le han dicho que no—, entrará en concurso de acreedores, que será su agonía antes de la muerte. Enrique Alonso /Jaén
Fuente: Diario Jaén
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