Inquietud entre los olivareros por el proyecto de reforma de la PAC

Foto: Juan Carlos Fernández
Silvia Ruiz Díaz
Los olivareros que asistieron a la asamblea anual de Asaja de Martos resolvieron sus dudas sobre lo que supondría la actual propuesta de reforma de la PAC. La asociación dejó claro que los agricultores perderán mucho y dijo que hay que presentar proyectos alternativos.

La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Martos celebró su asamblea anual, que destacó por la inquietud de los olivareros del municipio y la comarca ante la propuesta de reforma de la Política Agraria Común (PAC) realizada desde Bruselas y que cuenta con un rechazo frontal desde España.

Su responsable en Martos, José Manuel López Carrasco, subrayó que, ante esta preocupación, el colectivo explicó a los asistentes lo que puede suponer su aprobación dentro de algunos años. “Es cierto que no hay nada fijo, pero podrían desaparecer los derechos históricos y se pretende que las ayudas sean iguales por el solo hecho de tener una explotación o un número de hectáreas”, agregó. “Por otro lado, se vincula el 30 por ciento de las ayudas a la agricultura verde y esto nos choca, porque ya lo cumplimos en nuestra PAC”, señaló.
López Carrasco precisó que también existe cierto temor entre los olivareros de la comarca ante esta propuesta de reforma por el asunto presupuestario. “Se reduce en un 11 por ciento, y vamos a tener recortes en ayuda porque ahora se repartirán entre 27 países”, especificó. Asimismo, consideró que las pérdidas para los agricultores de la comarca pueden ser de un 50 por ciento.
Desde Asaja animaron a luchar en contra de esa propuesta y reivindicar la defensa de los derechos de los agricultores. “Martos se está jugando muchísimo con esta reforma de la PAC, que comienza con unos proyectos. Si no se pelea desde un principio y se presentan proyectos alternativos, mal nos va a ir”, apuntó.
Durante la asamblea, también se habló sobre el comienzo inminente de la campaña de recolección. Hubo una charla sobre herbicidas y se abordó la situación ruinosa de los precios del aceite de oliva, una de las máximas preocupaciones de los agricultores, que ven cómo el mercado sigue sin remontar. Asimismo, se trató sobre la contratación de trabajadores inmigrantes para la cosecha y se alertó de que hay empresas que “desorientan” a los trabajadores al decirles que necesitan un carné especial para circular y trabajar en el campo.